Las águilas rojas no fallaron ante su afición goleando al muy flojo Paços de Ferreira, que tan sólo ha conseguido cuatro puntos en siete partidos. El Benfica dominó desde el primer minuto, teniendo la posesión del balón y las ocasiones más claras, aunque el juego no fuera del todo claro. Ya en el minuto seis, el árbitro anulo un gol a Cardozo después de señalar fuera de juego. Saviola se reivindicó, marcando por partida doble, después de muchos partidos sin encontrar la portería rival. El primero de los goles llegaría en el minuto 22': un gran centro de Maxi Pereira lo remataba al área pequeña Cardozo y el "conejo" Saviola muy atento, introducía el balón dentro de las mallas. El segundo, Bruno César sacaba un córner y Saviola lo remataba de primeras consiguiendo así el 2-0 en el minuto 43'. En la segunda parte siguió la misma tónica, aunque en el 51' el Paços Ferreira asustaba a los aficionados recortando distancia, 2-1, con un gol de Michel de penalti. En este momento, el Ferreira se venía arriba y tenía que aparecer la figura incansable de Artur, haciendo de las suyas con magníficas atajadas. En el 65', Aimar demostraba que lo mejor que se le da hacer es dar asistencias, y lo hacía en una falta indirecta que remataba Luisao al fondo de la portería. Tan sólo dos minutos después, Nolito batía a Cássio, después de una pasividad incomprensible de la defensa visitante. El Paços de Ferreira despertaba pero ya era demasiado tarde. El Benfica ganaba de nuevo, con una buena goleada, que le pone tres puntos por encima del Oporto, aunque éste aún tiene un partido menos, que lo juega mañana frente al Académica.
Pablo Aimar salió desde el principio del partido y acabó jugando los 90 minutos del partido, después de haber descansado el último partido de UEFA Champions League. El argentino demostró estar en plena forma, dio una magnífica asistencia de gol y ayudó al equipo a conseguir sobrepasar a su rival desde el primer minuto de juego.
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